Una vez tenemos terminada nuestra página web sólo queda
publicarla en Internet para hacerla accesible a los millones de internautas de
todo el mundo. Hoy en día nos parece normal que cualquier persona del planeta
pueda ver nuestras páginas web en Internet pero hasta la década de 1990 a nadie
se le hubiera ocurrido soñar que sería tan fácil y tan barato poder comunicarse
con tanta gente.
Básicamente para publicar hace falta tener acceso a un
servidor de Internet y disponer de una forma de subir los archivos al servidor.
También es conveniente saber lo que es un dominio de Internet y cómo hacer que
nuestra página sea encontrada por los buscadores.
También podemos publicar en un servidor local instalado en
nuestro ordenador, de esta forma podremos probar las páginas dinámicas sin
subirlas a Internet, por ejemplo, mediante WAMP o XAMPP podemos instalar un
entorno con el servidor APACHE, PHP, MySQL en Windows. Para Linux XAMPP o LAMP.
Como ya dijimos en la unidad 1, si lo que te interesa es
simplemente escribir en Internet y no te atrae la parte técnica o informática,
lo más adecuado es utilizar los blogs gratuitos como Blogger o WordPress.com.
Servidores
Para que tu página se vea desde Internet simplemente tiene
que estar almacenada en un servidor de Internet. Es decir, debes disponer de
espacio en un servidor para poder subir tus archivos, donde cualquiera pueda
verlos.
Cualquiera puede tener un servidor de Internet, sólo hace
falta un ordenador, una dirección IP fija, una conexión telefónica y un
software adecuado, como el servidor Apache, que además es gratuito. Esto
explica el gran crecimiento inicial de Internet. Han surgido miles de
servidores que comparten su información por el simple gusto de aprender y
enseñar. Y muchos más que esperan hacer negocio en la red.
De todas formas, crear un servidor tiene cierta complejidad
y se sale del ámbito de este curso, además necesitarías una conexión permanente
a Internet y un ordenador con el servidor web en funcionamiento las 24 horas
del día. Sí es más accesible instalar en servidor local como WAMP, en el curso
de Dreamweaver de aulaClic lo tienes explicado.
Para acceder a un servidor de Internet hay dos alternativas,
buscar un servidor gratuito o contratar uno de pago. Para empezar puede servir
un servidor gratuito pero para cosas más serias es conveniente utilizar un
servidor de pago.
• a) Servidores gratuitos.
Podemos diferenciar dos alternativas gratuitas:
• Sitios especializados. Existen algunos sitios web
especializado en ofrecer espacio gratuito como Fortunecity, Tripod, iEspaña,
Galeon, etc. La mayoría colocarán publicidad en las páginas alojadas. Los
servidores gratuitos pueden imponer restricciones en el uso de ciertas
instrucciones de programación web y no te permiten cambiar la configuración del
servidor. Cada vez es más difícil encontrar servidores gratuitos con un mínimo
de calidad. Google Sites es un caso aparte.
Algunos proveedores anuncian servidores gratuitos pero al
leer el contrato con detalle podemos encontrar condiciones como que sólo es
gratuito el primer mes, que hay que tener un número mínimos de visitas, etc.
También hay que destacar que la mayoría de servidores
gratuitos no admiten el uso de páginas dinámicas ni bases de datos.
• Proveedores de acceso. Cuando contratas un servicio de
conexión a Internet a través de un proveedor, suelen ofrecer de forma gratuita
un espacio web en sus servidores. Por ejemplo ya.com, Orange, Telefónica, etc.
Si ya tienes contratada una conexión a Internet, revisa las condiciones porque
probablemente tienes derecho a un espacio gratuito en el servidor.
• b) Servidores de pago.
Si quieres tener un lugar más profesional donde colocar tus
páginas o las de tu empresa puedes utilizar los servicios de empresas
especializadas que por menos dinero de lo que piensas te ofrecen muchos
servicios, prueba a visitar Arsys , Acens o Alojalia y ver sus condiciones y
tarifas.
Los servidores pueden ser de dos tipos básicos, compartidos
o dedicados. Un servidor compartido (shared hosting) es aquel que comparte
máquina física con otros servidores compartidos. En un servidor dedicado una
máquina física soporta un solo servidor dedicado.
En un servidor compartido no se te permiten cambiar
completamente la configuración del servidor, ni hacer reinicios físicos de la
máquina, mientras que un servidor dedicado puedes hacer todo lo que quieras
puesto que el servidor está completamente a tu disposición. Inicialmente es
preferible un servidor compartido ya que es más asequible y ofrece
prácticamente todos los servicios que son necesarios para un uso particular o
profesional. Un servidor dedicado es conveniente para un sitio web con muchas
visitas o si se requiere una configuración muy especial del servidor.
Los servidores ubicados en EE.UU. ofrecen más recursos por
el mismo precio pero con el inconveniente de la atención al cliente en inglés:
lista de los mejores.
En este buscador de alojamiento o Hosting puedes encontrar
servidores con las características que desees: BuscaHost.
A la hora de contratar un servidor ten en cuenta que es
importante la velocidad con la que las páginas se cargan en Internet y no todos
ofrecen la misma velocidad de transferencia o ancho de banda. Algunos
servidores ofrecen "espacio ilimitado" pero en realidad quieren decir
"espacio suficiente" para la mayor parte de los usuarios.
También es importante fijarse en las condiciones del
servicio de atención al cliente que ofrecen los distintos proveedores.
Dominios de Internet
http://www.nombre_dominio.com
Un servidor web necesita disponer de un dominio de Internet
para que se pueda acceder a él en la forma http://www.nombre_dominio.com. Por
ejemplo, si quieres disponer del sitio web http://www.dibujosdemotos.com
deberás contratar el registro del dominio "dibujosdemotos.com"
(siempre que alguien no lo haya registrado antes).
Los dominios hay que contratarlos en un registrador
autorizado por un periodo de tiempo determinado, por ejemplo, un dominio .com
por un año vale sobre 25 euros. Las empresas que ofrecen alojamiento también
suelen ofrecer registro de dominios: Arsys o Acens
Los servidores gratuitos suelen ofrecer subdominios de la
forma http://www.servidor_gratuito.com/tu_subdominio, de forma que no necesitas
registrar ningún dominio ya que los subdominios no se registran.
Subir archivos al servidor
Lo normal es desarrollar nuestro sitio de forma local, es
decir, en nuestro propio equipo. Pero una vez conseguimos un servidor, gratuito
o de pago, tenemos que subir a él todos nuestros archivos.
Hay varias opciones a la hora de subir los archivos al
servidor:
a) Utilizar un programa específico para ello como el
Filezilla.
Se trata de un cliente FTP. Para transferir ficheros por FTP
se necesita tener instalado un programa cliente de FTP en nuestro ordenador y
conocer la dirección del servidor FTP con el que queremos conectar. Nuestra
dirección nos la proporcionará la empresa con la que tengamos el alojamiento.
Una vez conectado, los programas FTP tienen un interfaz
bastante simple. Básicamente, nos muestran los archivos de nuestro equipo a un
lado, y los del servidor a otro. Con lo que no tenemos más que arrastrar y
soltar archivos de un lado a otro.
La principal ventaja del FTP, a parte de su comodidad, es
que nos permite subir varios archivos y carpetas enteras a la vez, sin tener
que ir uno por uno.
b) Utilizar un editor de páginas web que incorpore esta
funcionalidad. Por ejemplo, el Dreamweaver.
Algunos editores profesionales incorporan el acceso FTP.
Esto que nos permite subir y descargar los archivos cómodamente usando el
interfaz del editor. Además, nos permiten tenerlos sincronizados, e ir subiendo
automáticamente aquellos archivos que vayamos actualizando.
Puedes encontrar más información sobre esto en el Curso de
Dreamweaver en aulaClic.
c) Utilizar las facilidades proporcionadas por la empresa de
hosting.
Realmente no necesitamos ninguno de los programas
anteriores, aunque casi siempre sean de mejor calidad. Toda empresa de hosting
nos proporciona un interfaz a través del que subir archivos al servidor. Este
interfaz depende de la empresa. Los de alojamientos gratuitos suelen ser
bastantes simples, permitiéndonos subir unos pocos archivos cada vez a través
de un formulario web. Esto resulta muy tedioso si tenemos que subir un sitio
completo de tamaño medio. Los alojamientos de pago suelen tener un mejor
servicio. Algunos implementan un interfaz muy completo (WebFTP) que realmente
puede sustituir al cliente FTP.

